“Me voy a jubilar con la conciencia tranquila y muy contento”, dijo el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador. Entre sus razones para la satisfacción están una reducción de la pobreza de casi diez puntos, la estabilidad de la economía, la construcción de grandes obras de infraestructura como el Tren Maya y la proliferación de becas, créditos y subsidios para los mexicanos más pobres.